¿Cómo seguir siendo pareja siendo padres?
¿Cómo seguir siendo pareja siendo padres?
Culturalmente el enamoramiento se ve como un estado transitorio que se da al inicio de una relación. Sin embargo, es posible observar que la mayoría de las parejas en un plano íntimo desean continuar enamorados, que existan las mismas miradas cómplices que se daban al comienzo de la relación, desear y ser deseados por el otro, por lo tanto que no solo exista un querer como un cariño profundo. Es así como muchas veces pueden generarse desencuentros y aparecer la pregunta de por qué continuar juntos.
Muchas veces las respuestas ante esta pregunta son: los hijos, ya que quiero que tengan la familia feliz que yo nunca tuve, porque no quiero que ellos sufran y también porque me daría mucho temor comenzar nuevamente mi vida desde un yo y no desde un nosotros. Todos estos sentimientos y pensamientos son válidos, sin embargo, es probable que estas afirmaciones no sean algo que a nuestra pareja le gustaría escuchar.
En este sentido, es necesario poder diferenciar el espacio de pareja del de padres, dado que muchas veces se confunden.
El ser pareja alude en su definición a un espacio de dos, donde no existen terceros como los hijos. A su vez apunta a una relación de gran intimidad en el que el enamoramiento se hace necesario para continuar sintiéndose amados, deseados y valorados por el otro.
Desde esta perspectiva se hace necesario buscar espacios de pareja en donde la rutina permita dejar de lado por un momento el rol de padres, de modo que puedan existir conversaciones y emociones que los convoquen solamente a los dos como pareja. El resguardar estos espacios permitirá que esa emoción de sentirse enamorados pueda re-encontrarse a través de la búsqueda de momentos que nos posibiliten disfrutar juntos e incluso recordar actividades que estaban presentes al inicio de la relación.
Si bien es complejo encontrar estos espacios en la rutina es aquí donde debemos recurrir a nuestra creatividad y búsqueda de redes de apoyo. Algunas ideas para lograr esto podrían ser:
- Tener un horario definido en que los hijos se duerman y que le permita tener un tiempo solo para los dos.
- Planear una salida a un lugar al que iban cuando pololeaban, ya que esto podría permitirles recordar algunas emociones y deseos.
- Contar con un familiar o amistad de confianza que les permita dejar a sus hijos y tener una salida tranquila, sin preocupaciones respecto a cómo se encontrarán.
- Crear juntos alguna señal o palabra que sólo el otro identifique que les permita saber que necesitan tener un espacio para los dos, porque desean compartir algo importante con el otro.
- Enviarse algún mensaje por teléfono que remita sólo a los dos y no a los hijos.
Estas son algunas ideas, pero sin duda este es un tema mucho más complejo de resolver cuando se llevan años en una dinámica de ser padres y no de un nosotros como pareja. Es por esto que muchas parejas nos consultan por esta temática, la que trabajamos en conjunto para buscar alternativas de solución.